5 razones para conocer el porqué de tus objetivos

Cuando anteriormente hablábamos de cómo emprender cambios con decisión o por qué abandonamos nuestrosproyectos a largo plazo, mencionábamos la necesidad de establecer unos objetivos que marquen el camino.

Como ya se ha planteado, marcar unos objetivos nos ayudará a focalizar nuestros esfuerzos en aquello que consideremos importante y sobre todo, nos facilitará la tarea de planificación de los diferentes pasos o etapas que tendremos que llevar a cabo.

Sin embargo, aunque mucha gente sí suele marcarse unos objetivos (de una forma más o menos específica) es frecuente que olvidemos preguntarnos por qué queremos conseguir estos objetivos y no otros.

El porqué del por qué

Aunque suene a trabalenguas, conocer lo motivos o las razones que nos mueven a querer conseguir algo, es básico para alcanzar el éxito en nuestros propósitos. Aquí tienes algunos de sus beneficios:

1. Constituye una poderosa herramienta de motivación.
   Cuando tenemos un proyecto u objetivo y sabemos no sólo qué queremos conseguir si no también: por qué valoramos esos resultados, o más específicamente, cuáles son los beneficios que nos va a reportar si ponemos nuestro empeño en ello, habremos impulsado de manera efectiva nuestra motivación.
   Tener una meta clara y unos beneficios obvios va a ayudarnos a perseguir y alcanzar de una forma menos costosa (en términos de esfuerzo, no sólo económicos) aquello que nos propongamos.
   
   
2. Ayuda a focalizar y priorizar esfuerzos.
   Si sabemos las razones que nos llevan a querer conseguir un objetivo, también sabremos en qué medida los queremos y cuánto estamos dispuestos a aportar para alcanzarlo.
   A menudo nos enredamos en proyectos con los que realmente no estamos comprometidos y que absorven toda nuestra energía y dedicación a lo que realmente sí es importante.
   Realizar ua evaluación de nuestros objetivos y las motivaciones que perseguimos con ellos, puede ayudarnos a replantear la utilidad y beneficio de seguir adelante con muchos proyectos que tenemos “atascados” desde hace tiempo.
   
   
3. Mejorará nuestra confianza en las decisiones.
   Saber de primera mano qué quieres conseguir y por qué, favorecerá la confianza en las decisiones que tomemos para llevarlo a cabo. Si no estamos siguiendo un camino al azar, si sabemos hacia donde vamos, nuestras decisiones estarán más enfocadas a conseguir resultados que simplemente si comenzamos sin ningún plan.
   La planificación no va a garantizarnos el resultado pero, si nos ayudará a tener la sensación de haber hecho un buen trabajo.
   
   
4. Ayudará a redefinir el camino.
   A partir de lo anterior, si conocer nuestras motivaciones va a ayudarnos a marcar el camino que debemos seguir también pueden ser un buen sistema para redefinirlo.
   Revisar periodicamente nuestros objetivos y razones para conseguirlos va a ayudarnos a saber si nos estamos desviando de nuestra planificación, permitiéndonos reconducirnos o incluso, si debemos modificar nuestros objetivos porque han cambiado las motivaciones que los impulsaban.
   
   
5. Una vez más, dará un nuevo impulso a nuestras acciones.
   Todo el mundo siente en algún momento dudas respecto a lo que está haciendo, si tiene sentido, si no es mejor abandonar,...
   Repasar los objetivos que queremos conseguir y nuestras razones, puede marcar la diferencia en estos momentos de duda. Ya sea para ayudarnos a conseguir nuestros objetivos o para tomar un nuevo rumbo.
   
   

Image via: Tienecojones